Entender las normativas tributarias y fiscales de nuestro país puede resultar un poco complejo y, en consecuencia, muchas son las cuestiones que surgen a los contribuyentes para el cumplimiento de dichas obligaciones. Uno de los tributos más renombrados es el Régimen del Monotributo, del cual, con el equipo de Xubio te acercamos este artículo en el que te contaremos los diferentes tipos de monotributo que existen, cuáles son sus características principales, y exigencias por parte de la AFIP. En pocos minutos de lectura encontrarás información importante para entender este tributo tan utilizado en nuestro país. ¡Seguí leyendo!
¿Qué tipos de monotributo existen y cuáles son sus características?
Como les comentamos en el inicio de la nota, nuestro país tiene una carga tributaria y fiscal muy alta. Según un relevamiento realizado por el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), Argentina cuenta con 165 tributos activos entre los niveles nacionales, provinciales y municipales. Entre los tributos más destacados encontramos el Régimen Simplificado para pequeños contribuyentes (Monotributo). Este impuesto fue creado en 1998 bajo la ley 24.977 cuya finalidad es simplificar a los pequeños contribuyentes su carga tributaria. Esa disminución se logra mediante la unificación de componentes tributarios como el IVA y ganancias (componente impositivo) y aportes y jubilación y obra social (Componente previsional).
Al momento de la inscripción en el régimen de monotributo, el contribuyente va a tener la posibilidad de encasillarse, según su necesidad y características laborales, en algunos de los tipos de monotributo que detallaremos a continuación:
Como trabajador independiente
Este es el tipo de monotributo más elegido por los contribuyentes. Se utiliza en casi todos los casos en el que se vende productos o se presta servicios por cuenta propia, con o sin empleados. Si estás trabajando en relación de dependencia, solo vas a pagar el componente impositivo, porque tu empleador es el que realiza los aportes jubilatorios y de obra social.
El régimen de monotributo unifica en un solo valor el componente impositivo y el componente previsional. El valor de la cuota que vas a pagar del monotributo varía según la categoría en la cual estás inscripto, pero en todas podemos encontrar tres componentes que lo conforman:
● Obra Social
● Aportes jubilatorios
● Impuestos (IVA y ganancias)
Para obtener más información sobre el monotributo mas elegido por los contribuyentes hace click aquí e ingresá en la nota que realizamos anteriormente sobre la composición de la cuota de monotributo.
Como miembro de una cooperativa
Si sos miembro de una cooperativa y tus ingresos brutos anuales no superan los $466.201.59, vas a tener la posibilidad de no pagar el componente impositivo de monotributo (sí jubilación y obra social). La característica excluyente es que la cooperativa tiene que estar registrada en la Administracion Federal de Ingresos Públicos (AFIP).
Pero, si tus ingresos brutos anuales pasan la suma de $466.201,59 deberás abonar, además de las cotizaciones previsionales, el impuesto integrado que corresponda, de acuerdo con la categoría en la que te encuadras y según el tipo de actividad que realizas.
Como trabajador independiente promovido
El Monotributo Promovido es un tipo de monotributo que se pensó para las personas que están incursionando en una actividad como trabajadores independientes. Si realizas una única actividad y cumplís con ciertos requisitos, pagás solamente el 5% de lo que factures en el mes y ese dinero se destina a tus aportes jubilatorios. Como trabajador independiente promovido podés optar por pagar una obra social y elegir la que creas más conveniente del listado oficial.
A continuación, le detallamos las características que deben cumplirse, de manera conjunta, para encuadrar dentro de esta categoría según la Ley 26.566 en su Artículo 31:
a) Ser persona física mayor de 18 años.
b) Desarrollar exclusivamente una única actividad independiente, no ser importador de bienes o servicios y no poseer local o establecimiento estable.
c) Que la actividad sea la única fuente de ingresos.
d) No poseer más de 1 unidad de explotación.
e) Cuando la actividad se trate de prestación de servicios, no llevar a cabo en el año calendario más de 6 operaciones con un mismo sujeto ni superar en estos casos de recurrencia los $ 4.000 en cada operación.
f) No ser empleador.
g) No ser contribuyente del Impuesto sobre los Bienes Personales.
h) No haber obtenido en los 12 meses calendario inmediatos anteriores al momento de la adhesión, ingresos brutos superiores al tope para la Categoría A.
i) La suma de los ingresos brutos obtenidos en los últimos 12 meses inmediatos anteriores a la obtención de cada nuevo ingreso bruto – considerando al mismo – debe ser inferior o igual al importe previsto en el punto anterior.
j) No haber superado los 2 años de graduado en el caso de profesionales universitarios contados desde la fecha del título y que el mismo se hubiera obtenido sin la obligación de pago de matrículas ni cuotas por los estudios cursados.
Monotributo Social
Dentro de los tipos de monotributo encontramos el monotributo social. Es un régimen tributario especial que busca la inclusión de emprendedores en una situación socioeconómica vulnerable, y que realizan una única actividad económica por cuenta propia y se encuentran fuera del mercado formal laboral o trabajando en relación de dependencia con ingresos brutos inferiores al haber previsional mínimo.
Mediante el Monotributo Social los emprendedores pasan a ser contribuyentes teniendo la posibilidad de emitir facturas, acceder a las prestaciones de las obras sociales del sistema nacional de salud e ingresar al sistema previsional. También pueden ser proveedores del Estado.
Si estás dado de alta en el Registro Nacional de Efectores de Desarrollo Local y Economía Social, te podés adherir al Monotributo Social habilitado por el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación.
Requisitos para ingresar al Monotributo Social según la AFIP:
- Contar con un ingreso bruto anual inferior a $466.201,59
- Ser propietario de hasta 2 bienes inmuebles, siempre que uno de ellos se encuentre afectado al emprendimiento productivo.
- Ser propietario de hasta un máximo de 3 bienes muebles registrables.
- No ser profesional universitario en ejercicio de tu profesión como actividad económica.
- No ser empleador ni titular de acciones o cuotas partes de sociedades comerciales.
- Contar con ingresos que provengan solo de la actividad económica declarada, sin tener en cuenta las prestaciones compatibles que otorgan los organismos nacionales, provinciales o municipales.
Régimen Simplificado Especial
Este tipo de monotributo está destinado a los pequeños productores agrícolas siempre que su actividad principal sea el cultivo de tabaco, caña de azúcar, yerba mate, té u otras hojas que se utilizan para preparar infusiones; y sea su única fuente de ingresos.
Este régimen especial excluye a los contribuyentes a pagar el impuesto integrado, debiendo abonar únicamente las cotizaciones previsionales previstas disminuidas en un 50 % por todas las actividades.
Monotributo unificado
Es un sistema unificado que simplifica y unifica trámites nacionales y provinciales para el pago de impuestos. Además, reduce la carga administrativa y representa un ahorro económico para los contribuyentes.
El monotributo unificado está destinado a los ciudadanos monotributistas de las provincias de Entre Ríos, Mendoza, Córdoba, San Juan, Jujuy, Salta, Río Negro, Buenos Aires y Neuquén que se encuentran alcanzados por el impuesto sobre los Ingresos Brutos de las administraciones tributarias provinciales adheridas y por la contribución municipal y/o comunal.
Este sistema permite abonar en un solo pago las siguientes obligaciones:
- El impuesto integrado.
- Los aportes al Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA) y, de corresponder, al Sistema Nacional del Seguro de Salud.
- El impuesto sobre los Ingresos Brutos del Régimen Simplificado Provincial.
- La contribución que incide sobre la actividad comercial, industrial y de servicios, siempre que el municipio o comuna haya celebrado con la Provincia un convenio de colaboración para la recaudación de dicho tributo.
En conclusión
Como vimos a lo largo del artículo, en nuestro país hay una gran carga fiscal y tributaria que hace que los contribuyentes tengan mucha presión impositiva a la hora de realizar actividades formales. Los distintos tipos de monotributo ayudan e impulsan con sus diversas características a los contribuyentes a ingresar en la formalidad dándole herramientas para su progreso y proyección en el mundo laboral de nuestro país.
Por eso, esperamos que hayas entendido lo importante que es conocer con profundidad los distintos tipos de monotributo que existen actualmente y su funcionamiento. Pero, sobre todo, es importante que sepas que existen soluciones de gestión como Xubio, que te permiten simplificar todos estos pasos y es completamente legal y seguro. Si querés conocer más sobre este servicio, te recomendamos que ingreses a xubio.com y resuelvas todas tus dudas. Gracias por leernos ¡Hasta el próximo artículo!
