El modelo freemium es una excelente forma de atraer nuevos clientes y dar a conocer tus productos y servicios en un mercado cada vez más competitivo.
A continuación vamos a contarte cómo funciona, cuáles son sus principales ventajas y desventajas, y en qué casos aplicarlo. ¡Seguí leyendo!
¿Qué es un negocio con modelo freemium?
Este concepto hace referencia a una forma de comercialización en la que se ofrece un producto o servicio básico gratuito, pero que requiere de un pago para acceder a funciones extra más avanzadas.
Su nombre derivada de la combinación de los términos “free”, que significa “libre” o “gratis” en inglés, y “premium”, que implica la idea de algo “superior” o “exclusivo”.
El modelo freemium es muy utilizado para vender soluciones basadas en tecnologías digitales, como las aplicaciones móviles, los softwares de gestión y los servicios en línea.
Su principal objetivo es reducir los costos de adquisición de nuevos clientes, al centrar su propuesta en las características reales del producto y evitar las grandes campañas de marketing y los procesos de venta problemáticos.
Además, esta estrategia de negocio es muy útil para generar un tráfico masivo en las páginas y redes sociales de la compañía.
¿Cómo funciona el modelo freemium?
Al no tener un costo inicial, el modelo freemium permite una captación masiva de clientes potenciales, a los que se busca conquistar poco a poco.
Para ello, ofrece un nivel gratuito limitado, que sirve como puerta de acceso al servicio y ayuda a divulgar sus propiedades y ganar la confianza de los usuarios a través de un uso real.
La idea es que con el tiempo estos quieran ampliar sus prestaciones y pagar por características adicionales, como nuevas funciones, mayor capacidad de almacenamiento o un soporte técnico personalizado.
Al apuntar a un mercado amplio, con que un pequeño número de clientes contrate el paquete premium ya alcanza para que el negocio sea rentable y subvencionar a los que no pagan.
En general, las tasas de conversión a un plan de pago dentro de un modelo freemium varían entre un 1 y un 10% promedio, de acuerdo al tipo de negocio.
Para generar más ingresos, también es posible añadir anuncios en la versión gratuita u ofrecer compras dentro de la aplicación. Esto debe hacerse siempre sin comprometer en exceso la experiencia de uso.
¿El modelo freemium y la prueba gratis son lo mismo?
Debido a que cuentan con algunas características similares, como la posibilidad de conocer el servicio sin necesidad de pagar, es habitual que algunas personas se confundan al modelo freemium con una prueba gratuita.
Sin embargo, se trata de estrategias de comercialización diferentes, ya que la primera es por tiempo ilimitado, mientras que la segunda tiene un plazo específico, que puede ser de una semana, un mes o un año.
De esta manera, en la prueba gratuita, cuando el período finaliza el usuario deja de acceder al servicio a menos que lo contrate. En cambio en el modelo freemium las funciones básicas están siempre disponibles, por más que el cliente elija no pagar.
En ocasiones, ambas prácticas se combinan. Por ejemplo, cuando un producto de uso libre ofrece el acceso a todas sus características “premium” por unos días. Tras esta experiencia, el participante puede contratar el paquete completo o volver a la versión gratuita limitada sin problemas.
¿Qué ventajas tienen los modelos freemium?
La adopción de un modelo freemium ofrece muchos beneficios, tanto para las empresas como para los clientes. Entre ellas se destacan:
- Reduce el gasto de adquisición de nuevos usuarios, al disminuir las campañas de comunicación para dar a conocer las características del servicio.
- Aumenta el posicionamiento de marca, al generar más confianza y llegar a un mercado mayor como consecuencia de la gratuidad y el boca a boca.
- Mejora la retención y fidelización de clientes, al brindarles un producto que no requiere de una compra inmediata obligatoria y establecer con ellos una relación de confianza a largo plazo.
- Facilita la escalabilidad del servicio, en paralelo con las necesidades de los consumidores.
Por otro lado, el modelo freemium también es una ventaja competitiva, al proporcionar una experiencia de calidad sin costo para los usuarios.
Además, el uso gratuito genera datos e información relevante que ayuda a la empresa a conocer mejor las necesidades de sus clientes y permite con el tiempo ofrecerles productos a medida.
¿Qué desventajas tienen los modelos freemium?
Más allá de estos beneficios, el modelo freemium también posee algunos inconvenientes que hay que tener en cuenta. El principal es que la mayoría de los usuarios se quedan para siempre en el nivel gratuito y nunca se hacen premium.
Esto ocurre porque, para un gran número de consumidores, el ahorro de dinero es su meta principal. Por ello, prefieren mantener una versión limitada del producto o soportar la presencia de avisos publicitarios a tener que pagar.
Otra desventaja es que, para que el modelo freemium sea rentable, es necesario alcanzar una gran base de clientes, lo cual no siempre es posible.
Por otro lado, el hecho de ofrecer un producto “free” puede atraer a un público que no sea el objetivo y que solo se vea cautivado por la propuesta. Además, al acostumbrarse con un servicio sin costo, muchos usuarios verán en el futuro el pago de un paquete extra como algo injusto.
En tanto, en algunos sectores, el modelo freemium puede generar un aumento de la competencia y la saturación del mercado, como consecuencia de muchas opciones gratuitas disponibles.
Ejemplos de modelos freemium
Para entender mejor cómo funciona el modelo freemium, veamos algunos ejemplos exitosos de su implementación. Esta forma de comercialización es muy común en:
- Servicios de streaming de música, como Spotify, que permite un uso básico sin costo, con anuncios publicitarios incluidos, y otro pago con mejores prestaciones, como una mayor calidad de sonido, reproducción sin conexión y lanzamientos exclusivos.
- Juegos para teléfonos móviles, que se descargan de forma gratuita, pero tienen una gran cantidad de anuncios, a menos que se acceda a un paquete premium.
- Plataformas de videoconferencias, como Zoom, cuyo nivel sin costo tiene limitaciones de tiempo, número de participantes y cantidad de reuniones diarias.
- Servicios de almacenamiento en la nube, como Dropbox, que ofrece una capacidad gratuita limitada, la cual se puede ampliar accediendo a un plan de pago.
- Aplicaciones para gestionar tareas y optimizar el trabajo el equipo, como Trello, cuya versión sin costo permite el acceso a un número limitado de pestañas y tableros y solo es posible la integración con otros sistemas pagando un extra.
- Plataformas y redes sociales de empleo, como Linkedin o Workana, que tienen un uso gratuito, pero también ofrecen una versión premium que destaca la candidatura por sobre las otras propuestas y otros beneficios.
Por otro lado, dentro de las soluciones de gestión, contabilidad en línea y facturación electrónica para pequeñas y medianas empresas, Xubio es también un ejemplo de modelo freemium, ya que ofrece un plan básico gratuito con un número limitado de comprobantes por mes.
Por una módica suma mensual, es posible acceder a un paquete completo sin restricciones y con más funciones, como liquidación de sueldos, ajustes por inflación automáticos y control del inventario en la nube.
Consejos para implementar un modelo freemium exitoso
La clave para que un modelo freemium funcione está en encontrar el equilibrio perfecto entre lo que se ofrece de forma gratuita y lo que se obtiene mediante un plan de pago.
Por un lado, es necesario que los usuarios tengan acceso a determinadas funciones esenciales del servicio, como para que puedan percibir su valor, pero no a tantas como para que no precisen cambiar a una opción premium con el tiempo.
A la hora de planear la estrategia de comercialización, es importante que las características extra queden bien claras y que las limitaciones del modelo “free” los dejen con ganas de más. Por ejemplo, lo habitual es mejorar la experiencia de uso, aumentar las posibilidades de expansión y eliminar las distracciones no deseadas, como la publicidad.
Otro aspecto a tener en cuenta es que el traspaso de un plan gratuito a otro pago debe ser simple y progresivo, para que no resulte engorroso para el cliente. Las notificaciones periódicas que recuerden los privilegios de un plan premium o las pruebas gratuitas de la versión completa pueden ser un buen incentivo.
Por último, el uso gratuito de los servicios ofrece siempre la posibilidad de recopilar datos, comunicarse con los usuarios y entender mejor sus necesidades específicas. Esto permite preparar soluciones a medida, que les resulten más interesantes y los impulsen a contratar un plan de pago.
En conclusión
El modelo freemium es una estrategia de comercialización ideal para aplicaciones móviles, softwares de gestión y servicios online, que apuntan a un gran mercado. Entre otras ventajas, su implementación ayuda a dar a conocer de forma rápida las características del producto y reducir el gasto de adquisición de nuevos clientes.
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